El pasado 27 de febrero de 2015 entró en vigor el Real Decreto-Ley 1/2015 de mecanismo de segunda oportunidad, reducción de carga financiera y otras medidas de orden social por el que, entre otras medidas, se aumenta la protección de los colectivos especialmente vulnerables por la crisis.
El texto extiende a dos años el periodo de suspensión de los lanzamientos de viviendas habituales de dichos colectivos que vencía inicialmente el próximo mes de mayo y posibilita, en términos similares a los previstos en el Código de Buenas Prácticas para deudores hipotecarios, que más personas puedan acogerse a esta suspensión. La medida será de aplicación a los procesos judiciales o extrajudiciales de ejecución hipotecaria en los que todavía este pendiente la realización del lanzamiento.
Otra medida que cabe destacar es la eliminación definitiva de la aplicación de las cláusulas suelo a favor de aquellos deudores situados en el nuevo umbral de exclusión y que las tuvieran incluidas en sus contratos.
Respecto del Código de Buenas Prácticas, la nueva normativa incrementa el límite anual de renta de las familias que podrán beneficiarse de sus previsiones e introduce como nuevo supuesto de especial vulnerabilidad que el deudor sea mayor de 60 años. También establece una nueva forma de cálculo del límite del precio de los bienes inmuebles adquiridos.