Después de haber realizado algunas operaciones aéreas propias entre Estados Unidos y Europa, y de haber incrementado las inversiones logísticas tanto en el centro logístico ubicado en Madrid como en la futura instalación de la compañía en Barcelona, Amazon sigue avanzando hacia la gestión propia y total de su red de logística iniciándose ahora en el negocio del transporte marítimo.
La Comisión Marítima Federal de Estados Unidos (“Federal Maritime Comission”), el organismo que se encarga de regular el transporte marítimo del país con el resto de países, ha incluido en su registro de empresas a “Beijing Century Joyo Courier Service”, compañía adquirida por Amazon en 2004, siendo ahora una de las filiales más potentes de Amazon China.
La licencia expedida por dicha autoridad estadounidense y que ha venido a registrar la filial como empresa de transportes oceánicos, no le permite operar con sus propios buques de momento, pero sí tendrá derecho a contratar la capacidad de transporte de una compañía marítima asumiendo Amazon China la responsabilidad de dichos contenedores.
Mediante esta medida, el portal de comercio electrónico aparte de tratar directamente con el cliente y poder controlar el proceso de entrega sin tener que depender de otras empresas de transporte o de mensajería, ahorrará costes de flete además de rentabilizar al máximo el espacio de sus contenedores.
Una vez más, se constata la influencia del transporte marítimo en el transporte internacional de mercancías.